La semana pasada plantee algunas cuestiones respecto del género Policial en la literatura Argentina que podrían resumirse en una cuestión de nombres: ¿por qué hablamos de “género policial” y no de “género de crimen” o “género de misterio” como en los países anglosajones que inventaron precisamente el género?
Pero la problemática que debe enfrentar el género en nuestro país tiene otras aristas que también deben ser consideradas.
Hace casi dos años, invitado a la primera edición del festival de novela policial “Córdoba Mata” y mientras estaba sentado en una mesa redonda junto a otros escritores en Mina Clavero, el organizador del festival, Fernando López, contó una anécdota interesante acerca de cómo le había costado ponerle un nombre al Festival.
Por lo general los festivales de novela policial en España e Hispanoamérica llevan por título el nombre de la ciudad donde se alojan y el adjetivo “Negro” o “Negra” como modificador: Buenos Aires Negra (BAN!), Medellín Negro, Semana Negra de Gijón, etc.
El problema que había tenido López era que al decir “Córdoba Negra” y por el dialecto típico de la provincia mediterránea, se generaban las condiciones para una confusión: “negro” o “negra” es una forma amistosa de llamar a un amigo o amiga en Córdoba pero nadie lo asocia con el género policial.
Luego de darle vueltas el nombre del festival quedó entonces como Córdoba Mata y eso le trajo otros problemas con algunos patrocinadores que ya se habían comprometido como aportantes al evento cultural porque la perspectiva de quedar asociados con un un festival que implicara cierta “criminalidad” en su nombre no les gustaba para la imagen de sus marcas. Continue reading “Algunos problemas del género policial en la Argentina (1era parte)”→
Hace unos meses me invitaron a participar de la Feria del Libro de Río Cuarto donde expuse en dos mesas junto a Sergio Olguín y luego también los dos junto a Fernando López, organizador él mismo del festival literario de género policial Córodoba Mata.
En un momento de esa segunda mesa en la que participamos, desde el público nos pidieron si podíamos definir las diferencias fundamentales entre novela policial noiry novela policial hardboiled.
Parecía una pregunta sencilla para tres especialistas en género policial pero a decir verdad, terminamos algo enredados con la respuesta.
Ayer estaba leyendo Hardboiled America un librito clásico acerca de los paperbacks policiales de los años 50s y viendo alguna reseña que le hacían encontré una crítica negativa que señalaba que el autor se confundía y utilizaba indistintamente los términos hardboiled y noir.
Teniendo en cuenta que escribí un cuento para la antología Buenos Aires Noir de la serie noir de Akashic Books que está por salir en los próximos meses, me preocupé: ¿podía ser que estuviera confundido respecto del significado verdadero de noir y su diferencia con harboiled?
Red Harvest de Dashiell Hammett: uno de los creadores del género hardboiled.
Es evidente que la confusión es común. Busqué entonces información al respecto y me topé con una carta que le envió el editor de Hard Case Crime (mi colección contemporánea de paperbacks/neopulps policiales favorita) a un admirador que también confundía los términos y me pareció tan buena la explicación que decidí traducirla para que por fin, los obsesivos y los estudiosos de la literatura por igual, podamos saber de qué hablamos cuando hablamos de hardboiled y de noir.
El muchacho que le escribió al editor le preguntó: “¿Cuáles son las características principales de la ficción hardoboiled noir?”