Mi villano favorito

alien

Dos meses atrás me escribió una periodista de la revista Quid para preguntarme acerca de qué villano de la literatura o la realidad es el que logró interesarme más. Le respondí brevemente porque se trataba de una nota donde saldrían opiniones de otros varios escritores y ahora la revista está en la calle y pueden comprarla (lo recomiendo, tiene un precio accesible y es de las pocas publicaciones literarias en el mercado. La consiguen en los locales de librerías Yenny-El Ateneo.)

Superando la brevedad que me impuso el formato de la nota, me gustaría aprovechar para explayarme acerca de mi elección de mis “villanos favoritos”. Y son en plural porque no es “un villano” el que más me fascina sino que son un conjunto: los nazis.

¿Por qué los nazis son mis villanos favoritos? Escribir villanos es quizás la tarea más difícil que uno pueda encomendarse. Un villano tiene que ser un personaje comprometido con su causa (una mala causa, obviamente), tiene que escapar del estereotipo del que hace el mal sin motivo, tiene que ser inteligente, astuto, audaz, la contrapartida perfecta de nuestro protagonista. Sí, tenemos que hacer un villano que nuestros lectores puedan odiar, pero también uno con el que en algún rincón oscuro también puedan llegar a sentir algún tipo de empatía o al menos comprender en su crapulencia.

zombie

Desarrollar un personaje con tanta riqueza no es nada sencillo y se le debe dar el lugar justo en nuestro relato sin que lo termine acaparando todo y sin que sea un muñeco inanimado, sin substancia y sin fundamento. No es nada fácil.

Pero dentro de toda esta serie de dificultades que tenemos para escribir villanos como escritores y de aceptarlos como lectores, los nazis escapan a todos los requisitos que acabo de mencionar.

¿Cómo? ¿Por qué?

La naturaleza misma del mal absoluto que encarnaron los nazis como conjunto, sumado a ciertas ramas de sus creencias más estrambóticas (ocultismo, magia negra, creencias religiosas neo-nórdicas), su positivismo racista, su afiladísima inteligencia, su control de masas que hace pensar en una especie de lavado de cerebros masivo, su simbología y estética marcial reconocible a simple vista y lo repugnante de la fría máquina de matar que montaron los posiciona sin dudas como los villanos perfectos.

Un villano nazi no requiere explicaciones, no requiere sentimientos, no requiere no ser una caricatura de villano porque básicamente en el estereotipo del nazi caben todas las posibilidades de villanía. Ellos no sólo cometieron crímenes repugnantes convencidos que lo hacían por el bien de la humanidad sino que lo hicieron con frialdad y cálculo (“el mal sin pasión”) al mismo tiempo que en viejos castillos de europa central practicaban rituales paganos, saqueaban obras de arte (porque tenían gusto refinado también) y dominaban el mundo como el típico científico loco de las novelitas de espionaje de la década de los sesenta.

ilsa

Por todo esto el nazismo contiene en sí mismo tanto el temor como la posibilidad de la parodia. Asusta, genera miedo y al mismo tiempo es una burla de sí mismo por algunos de sus rasgos más kitsch. El nazi como villano puede ir de un personaje en película de Tarantino, sádico y cruel pero refinado al perfecto villano de Capitán América, el bizarro Cráneo Rojo que justamente tiene su cráneo sanguíneo al descubierto y es un alto mando nazi en el universo de este súperheroe.

red skull

Por supuesto, el fin de la Segunda Guerra Mundial, su derrota y el relato de los vencedores ayudó a sacarle buena parte de la solemnidad épica que Hitler y sus intelectuales orgánicos le imprimieron al movimiento nacionalsocialista. La apropiación por parte de la cultura popular del nazi como villano funcionó en este sentido como un acelerador de la desacralización y dio lugar a su reposicionamiento como villanos algo bufonezcos.

Pero vayamos a un ejemplo concreto:

La Saga de Indiana Jones

La saga del antropólogo aventurero Indiana Jones es un excelente ejemplo de cómo los nazis son el villano perfecto. Pensemos en el canon de películas que conforman la saga:

1. Indiana Jones y los cazadores del Arca Perdida

raiders

Villanos: Nazis
Valoración de la película: Excelente (96% en Rotten Tomatoes / 8,6 estrellas en IMDB)

2. Indiana Jones y el Templo de la Perdición

heart

Villanos: Indígenas caníbales
Valoración de la película: 84% en Rotten Tomatoes / 7,6 estrellas en IMDB

3. Indiana Jones y la Última Cruzada

last

Villanos: Nazis (¡Adolf Hitler hace un cameo y todo!)
Valoración de la película: 88% en Rotten Tomatoes / 8,3 estrellas en IMDB

4. Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal

commie

Villanos: Unión Soviética
Valoración de la película: 78% en Rotten Tomatoes / 6,2 estrellas en IMDB

Si hacemos un promedio de las calificaciones de Rotten Tomatoes e IMDB tenemos lo siguiente:

– Promedio total de las cuatro películas

Rotten Tomatoes: 86.5%
IMDB 7.6 estrellas

– Promedio de las películas con Nazis como villanos

Rotten Tomatoes: 92%
IMDB: 8.45 estrellas

– Promedio de las películas SIN Nazis como villanos

Rotten Tomatoes: 81%
IMDB: 6.9 estrellas

Un cálculo simple nos permite sacar la siguiente conclusión:

– Las películas de Indiana Jones con Nazis como villanos obtienen una diferencia favorable respecto de las cuatro en conjunto de 5.5% en Rotten Tomatoes y de 0.85 estrellas en IMDB.

– Las películas de Indiana Jones con Nazis como villanos obtienen una diferencia favorable respecto de las que no tienen Nazis como villanos de 11% en Rotten Tomatoes y 1.55 estrellas en IMDB.

Como se ve, las diferencias son sustanciales. Ante la confirmación de una nueva película de Indiana Jones sólo podemos suplicar desde este modesto espacio que los villanos sean Nazis.

Pero agreguemos el videojuego Indiana Jones y el Destino de la Atlántida, quizás uno de los mejores (sino el mejor) uso de una franquicia del cine en los videojuegos.

indy

Villanos: Nazis
Valoración: Uno de los mejores videojuegos de la historia.

Además queda para considerar el cómic Indiana Jones y la Lanza del Destino que nunca llegó a película (lamentablemente) pero que involucra a los nazis buscando la lanza que en la Biblia le clavan a Jesús entre las costillas. De sólo pensarlo, la idea es perfecta ¿qué otro villano loco podría buscar la reliquia bíblica siendo al mismo tiempo sus intenciones serias y estrambóticas más que una rama del ocultismo nazi?

iron sky

Obviamente que una película o un relato no se basa solamente en su villano, pero sí en buena medida. Contra el villano se construye la trama. Un villano interesante, creíble, seductor es mucho más efectivo que uno caricaturesco.

Aprovechando la amplitud de arco que permite tener a nazis como los villanos, hemos visto Nazis-Zombie, Nazis en el lado oscuro de la Luna, Nazis sadomasoquistas y pronto tendremos Nazis con dinosaurios.

iron2

No cualquier producto con nazis como villanos tiene garantizado ser interesante o de calidad, pero sí una mayor probabilidad para que de entrada despierte un mayor interés que otro donde el villano no sea nazi.

Y es por todo eso entonces que los nazis son mis villanos favoritos.